Consejos útiles para padres y cuidadores

Perder a alguien que amamos es parte inevitable de la vida y esta situación se hace más dolorosa cuando tenemos niños en nuestro círculo cercano a los que debemos explicarles lo que sucedió. Aunque puede ser un tema difícil de abordar, es fundamental que los pequeños aprendan a comprender y afrontar la pérdida. 

Como adultos, tenemos la responsabilidad y deber moral de guiarlos a través de este proceso de una manera sensible y adecuada para su edad. En este artículo, compartiremos contigo algunos consejos para que ayudes a los niños a entender el fallecimiento de un ser querido y a manejar sus emociones durante este momento tan doloroso.

1. Habla abierta y honestamente del tema:

Abordar este tema con los niños puede ser un desafío, pero es esencial para ayudarles a comprender y enfrentar la pérdida.

2. Responde a sus preguntas:

Los niños son curiosos por naturaleza y, al enfrentar el fallecimiento de alguien que aman, es probable que tengan muchas preguntas. Atender sus inquietudes con claridad y comprensión es fundamental para ayudarlos a procesar ese momento.

3. Valida sus emociones:

Reconocer y validar las emociones de los niños durante el duelo es esencial para su bienestar emocional y desarrollo psicosocial.

4. Comparte recuerdos y celebra la vida de ese ser que ya no está:

Motivar a los niños a recordar y honrar a ese ser querido que partió puede ser una forma efectiva de apoyarlos en el proceso de duelo.

5. Busca apoyo adicional si es necesario:

En ocasiones los niños pueden necesitar apoyo adicional para procesar la pérdida de un ser querido. Buscar un profesional que te apoye en ese acompañamiento puede ser beneficioso para todos.

6. Ayuda a los niños a encontrar maneras de enfrentar el duelo:

Cada niño enfrentará el duelo de manera diferente y es importante ofrecerles herramientas y estrategias para que puedan sobrellevar la pérdida de la mejor manera posible.

Ayudar a los niños a entender y enfrentar la pérdida puede ser un proceso desafiante que nos rete como adultos, pero si lo hacemos con empatía, comunicación asertiva y apoyo emocional será un transitar del duelo más tranquilo para toda la familia y círculo cercano. 

Debemos tener presente que nuestro papel es proporcionarles un entorno seguro y comprensivo en el que los pequeños se sientan cómodos al expresar sus emociones y en el que puedan adaptarse a la pérdida teniendo claro que no están solos en ese proceso. 

Al seguir estos consejos y adaptarlos a las necesidades individuales de cada niño, estaremos facilitando su camino hacia la sanación y la resiliencia.